4 porciones • 1050 kcal/porción
Para el fermento:
30 grs de levadura
1 cda de azúcar
1/2 taza de agua tibia
Para la masa:
1 kg de harina
20 grs de sal
6 cdas de aceite
Agua (cantidad necesaria)
Preparación
En un recipiente colocar la levadura, el azúcar y un poco de agua tibia. Dejar fermentar.
En un bol colocar la harina y la sal. Mezclar bien.
Añadir la levadura ya fermentada y el aceite.
Agregar un poco de agua e ir mezclando con las manos para formar la masa. Agregar más agua de ser necesario.
Continuar amasando sobre la mesa durante varios minutos dándole unos golpecitos. La masa de pizza requiere que se amase mucho y tiene que quedar chiclosa.
Dejar reposar en un bol cubierto con un repasador o un film hasta que duplique su volumen.
Desgasificar la masa oprimiéndola con las manos.
Dividir la masa en cuatro o cinco bollos.
Espolvorear la mesa con harina y estirar los bollos usando un palo de amasar hasta lograr el tamaño de la pizzera donde se va a colocar.
Colocar la masa en cada pizzera.
Se las puede llevar un ratito al horno para "marcarlas", o sea, que se forme apenas un "piso".